Ahora las ciudades de Tacna y Moquegua están en calma, luego de 9 días de paro que de seguro dejó cuantiosas pérdidas económicas, sobre todo a Tacna, que en realidad no tenía nada que ver en tema del canon de Moquegua.
Frente a los sucesos, surge la preguntan si el conflicto pudo evitarse, yo creo que sí, y no lo digo con ánimo de menospreciar la labor del Gobierno en el diálogo con las autoridades de Moquegua que tuvo un buen fin, sino porque el malestar de la zona moqueguana venía siendo advertido desde hace un año atrás, no solo por las cartas provenientes de la Dirección Nacional de Inteligencia - algo que fue informado por Perú 21 -, y por el mapeo de conflictos que realiza mes a mes la Defensoría del Pueblo, sino también por la disparidad entre las cifras del canon que les tocaba a cada departamento, cuya brecha se iba abriendo año a año. Para el 2006, Moquegua recibió S/.271 millones por canon y Tacna S/.321 millones, y este año, la proyección era que Moquegua recibiera S/.185 millones y Tacna S/.700 millones.
Frente a los acontecimientos salen varias aristas: Tengo que recordar que el ministro de Defensa, cargo del “Gato Gordo”, indicó en una entrevista realizada en una radio local, me parece hace menos de una semana, que las informaciones de la Dirección Nacional de Inteligencia no eran concluyentes y que no alertaban concretamente sobre una posible protesta en Moquegua. Sin embargo, para hoy, “Gato Gordo” cambia de discurso, porque en Perú 21 sale una noticia donde Flores – Aráoz reconoce el error y señala que efectivamente existieron las informaciones pero no se tomaron las previsiones, y por eso ya se realizaron las medidas correctivas.
Esta situación debe reflexionarse, ya que latentes existen más de 60 conflictos según el mapeo de la Defensoría del Pueblo. Considero, que hay que tener cuidado con esas alertas y preparar mejor al personal que las reciben, porque “Gato Gordo” indica además que “No se trató de una falta de información, sino que las mismas eran generales y estaban escondidas entre muchas otras, y, (…) no todas tienen la misma intensidad ni la misma importancia”. mmm… en este país siempre se pasan por alto las alertas y después estamos lamentando.
Otro punto en esta arista es la Unidad de Prevención de Conflictos de la PCM, que se supone debería estar informada de los posible conflictos para evitar que exploten ya que por eso se llama “Unidad de Prevención de Conflictos”, que evidentemente no funciona.
El siguiente tema, en el "Moqueguazo", es el ministro Alva Castro, quien como siempre cobarde no aceptó ninguna responsabilidad en los hechos y achacó todo el problema al general, Alberto Jordán Brignole, quien en la víspera pidió una reunión con el presidente Alan García para informarle los hechos, ya que indicó había sido mal informando.
Existen muchas contradicciones en esta parte de la historia y las mismas deben aclararse, aunque lo único innegable, para mi, es que tanto Jordan, su superior Salazar, quien estuvo ayer en Cuarto Poder y resulta que no sabía nada, como el superior de estos, Alva Castro, son responsables y deben responder por la penosa participación de la Policía Nacional. Respecto a Alva Castro, también digo que debe renunciar, no se si por dignidad o por necesidad, pero es indudable que no puede con el ministerio.
La siguiente arista tiene que ver con la violencia y el reclamo de la población. Se sabe que la violencia no lleva a nada salvo a más violencia, pero a veces la impotencia en las personas puede más y sobre todo cuando pides algo durante meses y no te hacen caso, lo cual es lamentable. No trato de justificar a los amigos Moqueguanos, pero el Ejecutivo sabía de antemano el pedido de una distribución más justa del Canon y se debió actuar; sin embargo, el Ministerio de Energía y Minas y el Ministerio de Economía no hicieron caso y no fueron justos, pese a que sabían que de Moquegua salía más cobre para Southern Perú.
Dentro de esto, quiero señalar que tampoco considero bueno que se le quite canon a una zona para darle a otra, en estos casos son las empresas las que tienen que dar más a través del impuesto a la sobreganancia. Además cabe señalar que en el Perú la frase “el que no llora no mama” es una verdad, porque siempre se espera que la población proteste, para que el Gobierno se de cuenta de lo que está pasando, y como siempre actúe como bombero. Al parecer al Gobierno no le interesa prevenir….solo apagar incendios y tomarse la foto con las autoridades de turno.
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